Reencontrar el amor

«Para que una historia no termine, nunca debe empezar.»

Esta película es como la típica fiesta que piensas que será un coñazo, un cúmulo de tópicos sin gracia, y de golpe no solo te lo pasas bien: además conoces a alguien que te remueve. Y todos te lo notan al día siguiente. En este caso, solo fui a verla porque era francesa y salía París, para mí motivos suficientes para pasar un buen rato en el cine. Y lo pasé, pero además me gustó mucho.

Reencontrar-el-amor-Poster

A ratos rodada como un vistoso vídeoclip, esta historia no es exactamente la que te venden en el póster. Qué raro, ¿verdad? Es la historia de dos personas que van coincidiendo a lo largo del tiempo, pero nunca se atreven a dejarse llevar por eso que sienten. Dejan que sea el destino el que decida en sus vidas, para bien o para mal.

Sus fantasías se adueñan del día a día. Saben que con solo dar un paso todo daría un vuelco. Lo saben pero solo cantan. Para consolarse, para soñar. ¿Y si…? Siempre esa puerta entreabierta en el horizonte, como un armario que te lleva directo a la discoteca o un laberinto de espejos devolviéndote esa imagen que echabas de menos. Puede que lo suyo solo sea un capricho, pero más caprichoso es el azar con todas sus posibilidades. No por nada el título en inglés es Quantum of love.

Película-Reencontrar-el-amor

Creo que nunca hay que quedarse con la duda, pero en verdad la duda es un caramelo. Un caramelo intacto, por siempre envuelto en su celofán. O esa botella de vino que guardas en la nevera y que quizá nunca llegues a averiguar qué sabor tiene. Qué bonito es imaginar, cuántos mundos y alegrías de repente a tu alcance.

Deja un comentario

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s