In Our Heads es un disco de celebración. Porque no es frívolo celebrar las cosas conseguidas. Pequeños objetivos antes que grandes metas. Con unas letras que conquistan por su desnudez, el cantante, Alexis Taylor, desgrana la felicidad de su actual día a día: un corazón que vuelve a latir y otro cuerpo en la cama.
Después de cinco discos, los de Hot Chip redondean su fórmula de emoción bailable. Ya en Motion Sickness te arrastran a su batidora de influencias. No sabes si estás en una disco de los setenta, en los ochenta más electrónicos o en un revival noventero, pero bailas con ganas. Tienes una misión: contarle al mundo que sonríes.
Hay amor, hay baile y también hay sexo del bueno, claro, como en ese final épico de Don’t Deny Your Heart: gemidos orgásmicos encima de una base bien cargada de bongos y sintetizadores y guitarras. Incluso hay espacio para un par de baladas. Look At Where We Are es un homenaje a los caminos recorridos: qué fácil parece todo una vez coronas la cima y qué bien sienta respirar ese aire elevado.
Paso a paso, llegas a ese punto en el que hasta títulos a priori nada luminosos como These Chains te dan pie a escribir canciones eufóricas, de las de poner las manos en alto en plena fiesta playera. Casi chill-out termina la preciosa Let Me Be Him, pero antes hay siete minutos de crecimiento y éxtasis: una intro acapella, con pajaritos, a la que poco a poco se van sumando cajas de ritmos y coros. Puro himno.